Sin embargo, los ministros prefirieron armar una especie de “fiesta de la democracia”, donde todo el que quiso opinar, opinó; situación que se debe dar en el congreso, no en el TC.
Por último, el flamante nuevo presidente de “derecha” de dicho tribunal, al no encontrar buenas razones para rechazar la ley, declaró días antes que la constitución tiene problemas de redacción. Y claro, como tiene problemas de redacción, se debe tratar de adivinar que quiso decir el legislador, por lo tanto se interpreta la letra, es decir, se pasan la constitución por buena parte, todo esto con tal de satisfacer a la jauría vociferante. Luego votó en contra, pero se encargó de validar que otros votaran a favor de aprobar la ley de aborto. Sacó las castañas con la mano del gato
Ya chiquillas, denle nomás, y si hay problemas, dicen que las violaron. Total, es más que creíble que las puedan violar si acostumbran a fiestear medias curadas hasta la hora de la callampa con fulanos que acaban de conocer.
Ya les di mi pronóstico, Chile se convertirá en el país con más violaciones per cápita del mundo, tal como fue el país con más enfermedades del hijo menor de un año per cápita del mundo, hasta que aumentaron el posnatal a seis meses. Acto seguido, nos convertimos en uno de los países con menor cantidad de enfermedades del hijo menor de un año. Solo en Chile…
Tema aparte es el doña María Luisa Brahm, miembro del TC designada por Piñera. Mientras él se declara “a favor de la vida” y cosas por el estilo, su mascota vota a favor de la ley de aborto. Así, Piñera se encarga de quedar bien con los unos y con los otros.
Al parecer ayer todos ganaron, o al menos nadie perdió. Salvo los que aún no nacen y por lo tanto no votan.
P.D.: Otro tema, pero lean esta genial columna del diario de Cristiancito. http://www.elmercurio.com/blogs/2017/08/21/53547/Medio-siglo.aspx
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